lunes, 29 de octubre de 2007

Amy Winehouse: Back to black.

Sabemos que la industria del disco en Estados Unidos está y ha estado desde hace tiempo confinado en la mierda de lo que dicta Mtv, que cuando ellos hablan de música "negra" van inmediatamente a escuchar a grupos de rap o hip hop, y por eso me da un gusto enorme que Amy sea británica, en el gabacho le hubiera resultado difícil salir de los clubs de soul o antros de jazz.

Como el título del disco lo dice este es un volver a lo negro, al maravilloso soul que desde los tiempos de Aretha Franklin yo personalmente no escuchaba tan bien, ni con tanto sentimiento, ni con una voz tan privilegiada en alguien de su figura física. Parece la Amy una Hommy californiana, parece Amy una ninfa con tatuajes de hombre, es Amy una cantante grandiosa.

Este disco huele a alcohol sin arrepentimento, es triste y dulce, es el amor fallido el que hace que sea de una extraña luz nocturna, es ella misma desnuda y en plenitud a pesar de que se escucha su estado de ebriedad a lo largo del disco, ademas Rehab es una canción para acompañar a los caídos que disfrutamos de los excesos, un discazo.

They tried to make me go to rehab, but I said no, no, no.

1 cuadros de papel higiénico:

i dijo...

Este disco tiene ya un lugar privilegiado en mi corazón de cacto. Todas las rolas me gustan, aunque claro está, esa de Rehab tiene un "noséqué" que me llega, me llega... Yo voy a votar por esa en los premios más importantes de la farándula (los Nit Awards, of course).

Esperemos que la Winehouse (si hasta bonito apellido tiene) siga por esta senda de alcoholosa luz.